Santemar

Me han molado el ambiente y la bebida, eran bastante buenos.

He disfrutado un montón de todo, las bebidas y las comidas son muy buenos. En la habitación hay un minibar, una caja fuerte y una mesa de trabajo y la cama es comodísima. He visitado su restaurante Rincon de Mouro un par de veces.

Una habitación moderna, un lugar muy limpio y chulo, un personal super agradable. Los desayunos buffet con fresas y fruta fresca eran poco caros.

En general, fue un buen lugar para hacer turismo en Santander, me divertí mucho. Las camas eran bastante buenas, y la habitación era sorprendentemente nuevo y de un buen tamaño. Baño con un jacuzzi y artículos de aseo personal y una ducha de presión.

El hotel era fantástico, la habitación era sorprendentemente nueva con unas camas enormes. El desayuno inglés era barato y tenía un montón de alimentos. No tengo ninguna queja, hemos disfrutado mucho de todo. Recomendamos este hotel, es total.

Un lugar muy limpio con estilo clásico con todas las facilidades necesarias. La habitación era sorprendentemente nueva y lo suficientemente espaciosa, y los baños limpios. Nos han gustado el jacuzzi y la ducha eléctrica. Empleados complacientes.

Todo era ideal, sobre todo la ubicación y la comida, en general, he disfrutado de este hotel.

Tenía habitaciones lo suficientemente espaciosas, sorprendentemente nuevas con camas muy cómodas y una tetera y también hermosas vistas. Tenía una iluminación natural.

Algunas personas que trabajan allí fueron muy poco útiles.

Lo pasamos guay aquí. El registro fue rápido y el personal era complaciente.

Tenemos que agradecer a todo ese personal tan muy educado por una estancia guay. Hemos disfrutado un montón de la estancia en el hotel, el desayuno es abundante. Una habitación acogedora, clara. Tiene una ubicación estupenda en Santander, lo que es estupendo. Además, estábamos a 10 minutos a pie Playa del Sardinero.

Un hotel muy limpio en una zona hermosa. Las habitaciones sorprendentemente nuevas y los baños muy limpios eran muy bien decorados.

No tengo ninguna queja, tuve una experiencia perfecta. Me ha gustado pasar el tiempo en el verde jardín:)))

Nos ha gustado todo en este hotel: la ubicación y el personal eran ideales. El lugar, a unos pasos de los bares y los restaurantes. Estaba a dos pasos de Don Carlos, donde se puede comer.

Ha sido una experiencia súper agradable, he disfrutado mogollón de todo. Desayuno buffet con una gran selección de opciones. Habitaciones claras con vistas atractivas.

Un excelente lugar para viajar a Santander y explorar los lugares locales. Dormitorio bonito, baño de buen tamaño.

Era un lugar muy limpio, el personal era atento, y he disfrutado mogollón de mi habitación bonita. El desayuno era poco caro, con fruta fresca y también fresas. Un check-out tardío. En general un lugar ideal. Además, estaba a 5 minutos a pie del Sardinero.

El wifi era muy malo, me ponía un poco nerviosa.

Nos ha molado todo en él, pero sobre todo el confort y la ubicación. El hotel estaba en una zona preciosa.

La habitación era bien cuidada, el desayuno sabroso, y la ubicación era sensacional. Había una mini nevera, una plancha y tabla de planchar, una terraza en la habitación, me ha encantado todo.

Tenía unas vistas malas.

La comida estaba buena y la habitación era clara, fue una experiencia agradable. El personal fue atento y atendió todas mis necesidades. Fui a un restaurante bueno y me ha encantado la comida internacional que servían.

Un personal muy servicial y camas cómodas, una posición top. Una habitación compacta y para no fumadores, además del baño de mármol. He disfrutado mogollón de la vista al volcán, era estupenda. Había una playa bastante buena al lado de la propiedad.

El hotel es bonito, las habitaciones son baratas y las camas son realmente encantadoras. Hay una buena cantidad de cosas en la habitación: un climatizador, un espacio de almacenamiento y una silla. Está a poca distancia a pie de una playa increíble. Una zona de piscina increíble.

El personal estaba listo para ayudar, eran profesionales. Hotel de estilo clásico con muebles oscuros en las habitaciones. Las vistas eran increíbles. El check in rápido fue un plus. El hotel tiene una ubicación ideal, está muy cerca de una estación de autobuses, del puerto, de la costa.

Los días que pasé en el hotel fueron excepcional, sin duda volveré la próxima vez. Las camas son súper cómodas, el desayuno es más que suficiente y el personal es absolutamente brillante. Las habitaciones son elegantes, con baños lujosos y tienen un interior vintage. Realmente está muy bien situado. Además, estaba cerca del Gran Casino Sardinero. Un hotel impecable y un servicio excepcional.

Muy buena relación calidad precio y todo estaba muy limpio. Nos han encantado la posición, práctica, y el personal, muy agradable. Nuestra habitación era tranquila y tenía vistas al mar. El servicio fue agradable. Pasamos las noches en Dondenando, situado a 200 metros del hotel.

súper limpio, ubicación estupenda, habitaciones tranquilas. el bar era grande con personal complaciente.

Muy buena relación calidad precio en comparación con otros hoteles de Santander. Es un lugar magnífico con habitaciones modernas. Los jardines eran preciosos. Los servicios eran agradables y podía aparcar el coche en el aparcamiento privado.

Hotel enorme, lujoso e impecable. Una vista bonita al mar. El desayuno era mejor de la media, había un montón de comida buena. Se encuentra en una zona de playa. Además, pude explorar Gran Casino Sardinero, ya que estaba muy cerca del lugar.

Personal amable, camas comodísimas y desayuno delicioso. La habitación era súper grande, estaba ordenada y tenía un baño espacioso. Está en una zona de playa, justo al lado de la parada de autobús. También está cerca del Gran Casino Sardinero. Se ofrece un servicio agradable. El hotel era lindo, me ha gustado todo.

Para la cena elegimos la Telepizza, que estaba a 500 metros del hotel. El Palacio de La Magdalena era fácil de alcanzar. El WiFi gratis funcionaba perfectamente. Volveríamos ya mismo si visitamos Santander...

Nos quedamos cerca del Sardinero y pudimos visitar el Palacio de La Magdalena. Fuimos al Bar Caribe a cenar, estaba a solo 300 metros y estábamos satisfechos.